La reincorporación a la vida laboral debe garantizar la salud en los puestos de trabajo.
Las empresas están obligadas a asumir esta situación. Deben revisar, actualizar los protocolos de seguridad y adaptarlos a las nuevas necesidades.
Es fundamental e imprescindible que los Comités de Seguridad y Salud Laboral de cada empresa o centros de trabajo realicen el seguimiento del cumplimiento de la normativa y de los planes prevención. Cómo debe producirse la reincorporación a la normalidad es una responsabilidad que debe venir marcada por las personas expertas, regulada por el Gobierno y asumida por el empresariado.
La seguridad en el trabajo debe primar al hecho económico. Nos enfrentamos a otro modelo donde la cooperación de todas las partes será imprescindible para superar la situación creada y diseñar el futuro.
La comunicación, formación, información y sensibilización en esta situación es fundamental para las personas: conocer cómo proceder, cómo actuar, cuáles son los cambios en los procedimientos, qué no hacer, etc.
Se debe formar e informar sobre las medidas de prevención específicas relacionadas con la COVID-19.
Recordar varias veces durante las jornadas, personalmente o por megafonía, la necesidad de reducir al máximo el contacto propio y ajeno, lavarse frecuentemente las manos, etc.
28 d’abril, Dia Internacional de la Seguretat i la Salut en el Treball. Honrem les víctimes d’accident o malalties laborals i del coronavirus.
La neteja de les llars, les cures a les persones grans i menors tenen nom de dona. És de vital importància que mirem per elles, que tinguen tots els drets com a treballadores que són i que no s’infravalore la seua tasca
Se crea una plataforma unitaria de lucha que agrupa a todo el sindicalismo combativo del estado para defender los derechos de las repartidoras y repartidores